Mercabá

Ícone

Obras da Patrística

Feliz Natal

Puer Natus Est

1. Puer nátus in Béthlehem, allelúia:
Unde gáudet Jerúsalem, allelúia, allelúia.

2. Assúmpsit cárnem Filius, allelúia,
Déi Pátris altíssimus, allelúia, allelúia.

3. Per Gabriélem núntium, allelúia,
Virgo concépit Filium, allelúia, allelúia.

4. Tamquam spónsus de thálamo, allelúia,
Procéssit Mátris útero, allelúia, allelúia.

5. Hic jácet in praesépio, allelúia,
Qui régnat sine término, allelúia, allelúia.

6. Et Angelus pastóribuis, allelúia,
Revélat quod sit Dóminus, allelúia, allelúia.

7. Réges de Sába véniunt, allelúia,
Aurum, thus, myrrham ófferunt, allelúia, allelúia.

8. Intrántes dómum invicem, allelúia,
Nóvum salútant Principem, allelúia, allelúia.

9. De Mátre nátus Virgine, allelúia,
Qui lúmen est de lúmine, allelúia, allelúia.

10. Sine serpéntis vúlnere, allelúia,
De nóstro vénit sánguine, allelúia, allelúia.

11. In carne nóbis símilis, allelúia,
Peccáto sed dissímilis, allelúia, allelúia.

12. Ut réderet nos hómines, allelúia,
Déo et síbi símiles, allelúia, allelúia.

13. In hoc natáli gáudio, allelúia,
Benedicámus Dómino, allelúia, allelúia.

14. Laudétur sáncta Trínitas, allelúia,
Déo dicámus grátias, allelúia, allelúia.

Filed under: Hinos

Sanctus

SANCTUS, Sanctus, Sanctus,

Dominus Deus Sabaoth.

Pleni sunt caeli et terra gloria tua.

Hosanna in excelsis.

Benedictus qui venit in nomine Domini.

Hosanna in excelsis.

Filed under: Hinos

American readers

Recently, I received a lot of visits from american guys, and they have been searching some stuff that isn’t available in English. They had to recur to a very dubious tool: Google Translation. Well, I don’t want to see honest and interested people making such an unworthy effort to read the Fathers Works, so I’ll just indicate the best sites devoted to that subject :

New Advent

Thesaurus Precum Latinarum

Early Christian Writings

Christian Classics Etheral Library

I wish all my english-speaking readers have a profitable reading.

Filed under: Textos

Teódoto de Ancira

Fonte

teodoto.jpg

Teodoto fue obispo de Ancira, una población situada en Galacia, en el Asia Menor. Amigo personal de Nestorio, fue, sin embargo, uno de sus principales adversarios, cuando el Concilio de Efeso del año 431 condenó las doctrinas de aquél como heréticas. Nestorio afirmaba la existencia de dos personas en Jesucristo, negando el título de Madre de Dios a la Virgen Marta.

Teodoto alcanzó un gran prestigio como teólogo y defensor de la ortodoxia; junto a San Cirilo de Alejandra, representó un papel de primer orden en la confutación de los errores nestorianos. Adentrándose en el misterio de la Encarnación del Hijo de Dios, expuso con claridad y defendió con firmeza la verdad de la existencia de dos naturalezas en la única persona de Cristo y exaltó de modo especial la maternidad divina de Santa Marta, junto a su perpetua virginidad. Su muerte tuvo lugar en torno al año 446.

Entre sus obras merecen especial mención las dos homilías sobre el nacimiento del Señor. Pronunciadas en Ancira, fueron leídas en el Concilio de Efeso e introducidas en sus Actas.

Se recoge a continuación un pasaje de una de estas homilías. Con un estilo de argumentación muy típico de la época, Teodoto explica cuál es la lección fundamental que nos enseña la pobreza del Nacimiento de Nuestro Salvador: asumiendo nuestra naturaleza humana en medio de una gran indigencia, nos hizo participes de la
riqueza de su divinidad.

LOARTE

Filed under: Teódoto de Ancira

Teodoro de Mopsuestia

Fonte

TEODORO DE MOPSUESTIA había nacido en Antioquía, donde estudió y estableció una amistad duradera con San Juan Crisóstomo; esta amistad le indujo primero a entrar en un monasterio y luego, después de haberlo abandonado muy pronto, a regresar a él. El año 392, cuando llevaba ya nueve años de sacerdote, fue consagrado obispo de Mopsuestia, en Cilicia. Murió el 428, rodeado de gran fama.

Teodoro es el autor más famoso y más representativo de la escuela de Antioquía. Con sus numerosas obras ha pasado sin embargo lo mismo que con las de su maestro Diodoro de Tarso; últimamente se han podido recuperar algunas a través de sus traducciones a lenguas orientales, y junto con los fragmentos existentes de otras permiten hacer una reconstrucción aceptable de su teología. Así, por ejemplo, cita a menudo las cláusulas del símbolo bautismal, de manera que es posible rehacer éste y, de paso, darse cuenta de que es bastante diferente del que le atribuyeron sus enemigos.

En exégesis, parece que comentó casi todos los libros de la Escritura, siguiendo con gran rigor científico el método histórico y filológico propio de la escuela; escribió una obra Contra los alegóricos, en contra de Orígenes, cuyo título señala su posición frente a la exégesis alejandrina. Tiene también 16 Homilías catequéticas, recuperadas el año 1932; unas siguen el símbolo niceno y van destinadas a los catecúmenos y otras versan sobre el padrenuestro, el bautismo y la Eucaristía y se destinan a los neófitos, de una manera que recuerda la obra semejante de Cirilo de Jerusalén. Entre sus escritos dogmáticos destaca su obra Sobre la encarnación; tiene además una Disputa con los macedonianos, una refutación Contra Eunomio, otra Contra Apolinar y otra Contra los defensores del pecado original, que parece que sostenían que éste había corrompido la naturaleza humana. Son también obras suyas un escrito Contra la magia y otro, el Libro de las perlas, que posiblemente fuera una colección de cartas.

Filed under: Teodoro de Mopsuestia

São Sofrônio de Jerusalém

Fonte

sophronius_of_jerusalem_11march.jpg

Nació en Damasco, hacia el año 560. Probablemente ejerció como profesor de Retórica, hasta que, todavía joven, abrazó la vida monacal. Pasó veinte años bajo la dirección experta de San Juan Mosco. Juntos visitaron varios monasterios de Egipto, con el propósito de pasar a Roma. Una vez en la Ciudad Eterna, el año 619 murió San Juan Mosco. Entonces, San Sofronio decidió regresar a Palestina. En el año 633 o 634 fue elegido Patriarca de Jerusalén, mostrándose desde entonces como un pastor celoso de su grey.

La biografía de San Sofronio podría centrarse en dos polos de interés: su afán de santidad y su integridad doctrinal, que le llevó a sufrir mucho por defender la fe católica frente a la herejía del monotelismo. Estas dos características quedan muy bien reflejadas en su producción literaria, de la que nos han llegado algunas obras que podrían llamarse de entretenimiento, unos cuantos himnos y varios escritos hagiográficos, como la Vida de los santos egipcios Ciro y Juan y algunos fragmentos de una biografía del Patriarca alejandrino Juan el Limosnero, compuesta junto a San Juan Mosco.

El mismo año de su muerte, 638, vio con inmenso pesar como la Ciudad Santa caía en manos de los musulmanes, por obra del Califa Omar.

LOARTE

Filed under: São Sofrônio de Jerusalém

Santiago de Sarug

Fonte

Santiago de Sarug es uno de los grandes Padres de la Iglesia siria. Nació en el año 451 en el distrito de Sarug, a orillas del Eufrates. Según la tradición, completó sus estudios teológicos en Edesa, donde recibió unos sólidos conocimientos lingüísticos, filosóficos y teológicos. A los 22 años de edad se hizo monje y eremita.

No abundan los datos sobre su vida: en el año 502 es nombrado corepíscopo, oficio eclesiástico que ejercía una jurisdicción delegada del obispo. Durante esta época, visitó muchos monasterios ganándose la estima de monjes y eremitas. En el 519
fue consagrado obispo; y desde ese momento desarrolló un extensa labor pastoral hasta el momento de su muerte, acaecida dos años más tarde. Su fama de santidad lo hizo entrar en la liturgia y en el calendario de los santos. En la Iglesia latina es recordado el 29 de octubre.

Santiago de Sarug ha dejado una obra variada y abundante. Destacan los escritos en verso. Según algunos estudiosos, predicó unas 760 homilías, aunque sólo se han conservado la mitad y no todas han sido publicadas. En los siguientes párrafos, tomados de una de sus homilías sobre la Virgen, destaca el cariño con que Santiago de Sarug habla de la belleza sobrenatural y humana de nuestra Madre del Cielo.

LOARTE

Filed under: Santiago de Sarug

Salviano de Marselha

Fonte

Los datos biográficos que se poseen sobre su vida son escasos. Nacido en los primeros años del siglo V, en Colonia o Tréveris, no se sabe con certeza cuando se trasladó al sur de la Galia. Desde el año 426 vive en la comunidad monástica de la isla de Lerins, frente a las costas de Marsella. Tres años mas tarde era sacerdote.

Sus escritos revelan una esmerada formación cultural, y merecen especial atención sus estudios jurídicos. De las numerosas homilías y de su producción literaria se han conservado algunas Cartas y los tratados A la Iglesia y Sobre el gobierno divino. Esta última es su obra más importante, compuesta de ocho libros, en la que desarrolla el tema de la providencia divina. Se dirige a los cristianos para fortalecerles en la fe y en la confianza en Dios, en medio de la situación en que se encontraban los católicos en aquellos tiempos, bajo el dominio de los pueblos germánicos. Junto a la intención apologética, la obra trata de atajar los desórdenes morales del momento y exhorta a la conversión.

LOARTE

Filed under: Salviano de Marselha

São Romano, o Cantor

Fonte

Los escasos datos biográficos que poseemos sobre Romano proceden de dos documentos menores, de origen litúrgico: el Sinasario y el Meneo. Según esos textos, Romano nació en Siria, en la ciudad de Emesa, hacia el 490. Ordenado diácono en Beirut, durante el reinado del Emperador Anastasio se trasladó a Constantinopla, donde fue incorporado a la iglesia de la Santísima Madre de Dios. Allí se entregó a una vida de oración y de mortificación, caracterizada por su devoción a la Virgen. En el santuario de la Madre de Dios, recibió el carisma poético. Cuenta la tradición que una noche de Navidad se le apareció la Virgen y le entregó un rollo para que lo masticara y engulliera. Apenas cumplió su mandato, subió al ambón e improvisó un himno en alabanza del Nacimiento del Señor. La vena poética, milagrosamente desatada en él, inspiró nuevos y numerosos Kondakia, himnos para las principales festividades litúrgicas del año, especialmente las de Cristo y la Virgen. Se dice que compuso un millar de himnos, aunque son muchos menos los que han llegado hasta nosotros. Romano, que ha pasado a la historia con el sobrenombre de el cantor, murió entre el 555 y el 562, y fue sepultado en la iglesia de Ciro, donde se celebra su memoria el 1 de octubre. Aunque los temas de sus composiciones son muy variados, destacan los himnos mariológicos. La figura de la Virgen es contemplada a la luz de la vida y de la obra redentora de su Hijo.

LOARTE

Filed under: São Romano

Minúcio Félix

Fonte

MINUCIO FÉLIX era un abogado de Roma, cristiano, que nos ha dejado la única apología escrita en latín y en Roma, el Octavio. Esta apología es al mismo tiempo la mejor escrita de las que tenemos, y ha sido objeto de incontables estudios; su lenguaje es elegante, su exposición serena, su pensamiento claro. El autor tuvo sin duda a Cicerón como modelo, y también se observan influencias de Séneca así como, en menor grado, de otros autores, a los que alguna vez cita. Como es usual en las apologías, no aparecen citas de la Escritura, que no tenía ningún valor especial a los ojos de un pagano, y lo que se explica de la fe de los cristianos se limita a las verdades que podemos conocer con la razón natural.

La exposición toma la forma de una conversación entre tres amigos, uno pagano y dos cristianos, de los cuales uno es el autor y el otro Octavio. El primero en exponer sus argumentos es el pagano, Cecilio; el conocimiento de la verdad, dice, es sumamente incierto, por lo que más vale hacer caso de las enseñanzas de los mayores y seguir la vieja religión pagana, cuyos dioses, además, han dado la prosperidad a Roma; es inaudito que hombres sin cultura se atrevan a pensar lo contrario, y que en su orgullosa ignorancia quieran suplantar a los dioses al paso que viven en la mayor inmoralidad y proponen unas doctrinas inverosímiles. Octavio le responde que esta pretendida incultura y la humildad de los cristianos esconden la verdadera sabiduría, de manera que hasta los filósofos antiguos estuvieron de acuerdo en muchas de las cosas que ellos enseñan; la antigua religión es una mezcla de leyendas y supercherías, y es razonable abandonarla; los cristianos, lejos de ser inmorales, se esfuerzan por vivir de acuerdo con normas muy elevadas, de manera que su comportamiento es casi su mejor defensa. Al final del diálogo, Cecilio queda convencido.

La fecha del escrito, por sus estrechas relaciones con el Apologeticum de Tertuliano, relaciones que son sin embargo difíciles de determinar con precisión, se puede situar alrededor del año 197.

Filed under: Minúcio Félix

Lactâncio

Fonte

lactancio.jpg

Llamado el Cicerón cristiano por su elegante manejo de la lengua latina, Lucio Cecilio Firmiano Lactancio nació en el Norte de Africa, hacia el año 250, de familia pagana. Recibió una educación esmerada y adquirió cierto renombre como maestro de Retórica, por lo que el emperador Diocleciano le llamó a Nicomedia, para enseñar en la escuela que había fundado en la nueva capital del Imperio. Fue allí donde probablemente abrazó la fe cristiana. Durante la última gran persecución, hacia el año 303, se vio obligado a abandonar su cátedra y a exilarse en Bitinia. Después del Edicto de Milán, Constantino le llamó a Tréveris para confiarle la educación de Crispo, su hijo mayor. Poco más se sabe de la vida de Lactancio, que debió de morir en torno al año 317.

Entre sus escritos destacan los siete libros sobre las Instituciones divinas, que constituye el primer intento de redactar en latín una suma de toda la fe cristiana. Su enseñanza se desarrolla preferentemente dentro del campo de la moral natural; es muy inferior en los aspectos estrictamente teológicos. También por esta razón, Lactancio no es contado en el número de los Padres de la Iglesia, sino en el de los escritores eclesiásticos.

En los párrafos que se recogen, muestra—contra las fábulas paganas—que la sociedad humana tiene su origen en la voluntad de Dios, que ha creado al hombre a su imagen y semejanza; de ahí deriva el deber de la solidaridad entre los hombres.

LOARTE

Filed under: Lactâncio

João Mandakuni

Fonte

moryakubdasrug4.jpg

Entre la abundante literatura cristiana antigua, la que floreció en Armenia en los siglos IV y V es de las menos conocidas y, sin embargo, de riquísimo contenido espiritual.

Las fuentes documentadas hacen remontar al siglo III la predicación del Cristianismo en Armenia, por obra de San Gregorio el iluminador. Sin embargo, ya antes de esta fecha había cristianos en las regiones meridionales del País, colindantes con Siria, desde donde se realizó la primera evangelización.

La figura central de la literatura armena es San Mesrop, a quien se atribuye la invención del alfabeto armeno. Murió hacia el año 440. Uno de sus sucesores en la sede patriarcal fue Juan Mandakuni, nacido alrededor del 415, que fue catholikós de Armenia desde el año 478 hasta el 490, fecha de su fallecimiento. Modelo de pastor de almas, Juan Mandakuni es autor de homilías, cartas y oraciones, traducidas en gran parte al alemán durante el siglo pasado.

El fragmento que se recoge en las siguientes páginas forma parte de su discurso Sobre la devoción y respeto al recibir el Santísimo Sacramento, en el que pone de relieve la presencia real de Cristo en la Eucaristía y las disposiciones interiores con que los fieles han de recibirle.

LOARTE

Filed under: João Mandakuni

São Germano de Constantinopla

Fonte

san_german_de_dacia_pontica_278x412.jpg

Nació en Constantinopla o en sus inmediaciones, en una fecha incierta entre el año 634 y el 654. Hacia el 705 fue nombrado obispo de Cicico, metrópoli de la provincia eclesiástica del Helesponto. En el 715 fue nombrado Patriarca de Constantinopla, donde permaneció hasta el 729. Durante la crisis iconoclasta se opuso a la política de León III el Isáurico. El emperador intentó obligar a Germán a firmar un decreto contra el culto de las imágenes. Pero el anciano patriarca, repitiendo las razones que anteriormente había expuesto y su profesión de fe, se negó a obedecer las órdenes imperiales. Luego, despojándose de las insignias de su dignidad patriarcal, pronunció una frase que estaba destinada a gozar de fama imperecedera en la tradición oriental: «si yo soy Jonás, arrójame al mar; pero sin un concilio ecuménico, oh soberano mío, no me es posible establecer una nueva doctrina». Presionado fuertemente por el emperador renunció a su sede y se recluyó en Platanión, donde transcurrieron los últimos años de su vida. Murió en el año 733, siendo casi centenario.

El conocimiento actual de la producción literaria de San Germán permite afirmar que abarca casi todos los campos de la literatura religiosa: teológico, histórico, litúrgico, homilético y epistolar. Entre sus homilías destacan las siete que predicó con ocasión de las principales fiestas de la Santísima Virgen. Los sermones rebosan de la sublimidad y la grandeza del mundo divino. Sin embargo, a pesar de su perfección y de su extrema superioridad, el Cielo no se encuentra distante de la tierra: Dios, a través de María, se abaja hasta el hombre para atraerlo a si. Por eso, se comprende bien que el punto central de la teología mariana de San Germán sea la Maternidad divina de la Santísima Virgen. En estrecha relación con él, aparecen las demás prerrogativas, entre las cuales las más importantes son la inmunidad de Maria frente al pecado original, su Asunción al Cielo y su misión de Medianera de la gracia.

LOARTE

Filed under: São Germano de Constantinopla

São Fulgêncio de Ruspe

Fonte

_fulgencio_ruspe.jpg

San Fulgencio de Ruspe nació en Telepte, Numidia (norte de África) en el año 468. Terminados sus estudios fue elegido procurador de la cludad, pero renunció pronto al cargo, porque la lectura de una página de San Agustín le decidió a abrazar la vida monástica.

La furia de los arrianos le obligó a dejar el monasterio que había fundado y gobernado con ejemplar solicitud, y partió hacia Sicilia con intención de buscar la soledad en Egipto. Mas cuando el Obispo de Siracusa le puso al corriente de los daños que causaba el monofisismo por medio de los monjes egipcios, regresó a su patria, tras una visita a Roma. Allí fundó un nuevo monasterio, del que fue abad. Y ordenado sacerdote en el año 508, ocupó la sede episcopal de Raspe, una pequeña ciudad marítima.

Exiliado con otros sesenta obispos por los invasores vándalos, se refugió en Cerdeña, donde vino a ser el alma y el modelo de aquel grupo de fugitivos. El rey vándalo lo llamó a Cartago para participar en unas discusiones teológicas, pero su celo y su sabiduría alarmaron a los arrianos, que obtuvieron sin dificultad su nueva deportación a Cerdeña.

Restaurada la paz en África con el advenimiento del rey Hilderico, los obispos pudieron regresar a sus diócesis en el 523. A Fulgencio le quedaban aún diez años de fructuosa labor al frente de su grey, hasta que el 1 de enero del 533 lo llamó el Señor.

Escribió numerosas obras, sobre los misterios de la Santísima Trinidad y de la Encarnación, sobre la gracia y la predestinación, defendiendo la doctrina católica contra los errores, siguiendo a San Agustín. Su obra Sobre la fe, a Pedro (o Regla de la verdadera fe), resume magistralmente toda la teología cristiana.

LOARTE

Filed under: São Fulgêncio de Ruspe

Diodoro de Tarso

Fonte

DIODORO DE TARSO nació en Antioquía; allí realizó estudios teológicos, seguidos de otros estudios clásicos en Atenas, de lo cual se quejaría después el emperador Juliano, pues esto le habría permitido atacar con más eficacia el culto de los dioses. De nuevo en Antioquía, dirigió una comunidad monástica, y desde su cátedra en la escuela de esta ciudad defendió con gran valor e insistencia la divinidad de Cristo frente a los ataques del emperador Juliano, que residió allí muchos meses durante su campaña contra los partos. Estuvo desterrado en Armenia por el sucesor de Juliano, y a su muerte regresó y fue consagrado obispo de Tarso, en Cilicia (378), de donde anteriormente había sido obispo un antiguo profesor suyo. Tomó parte en el concilio de Constantinopla del 381, y el emperador Teodosio II le llamó uno de los árbitros más seguros de la ortodoxia. Parece que murió antes del 394.

Sus obras fueron muy numerosas. Como ya hemos dicho, se han perdido en casi su totalidad, pero tenemos listas de ellas. En sus obras de exégesis se atenía exclusivamente a la interpretación filológica e histórica y rechazaba con tesón la alegórica, tratando de buscar lo que habían entendido y querido decir los autores inspirados y no otros sentidos ocultos; había comentado todos los libros del Antiguo Testamento, los Evangelios, los Hechos, la primera carta de San Juan y probablemente otros libros del Nuevo Testamento. En sus numerosas obras apologéticas y polémicas, unas veces largas y otras muchas breves, escribió contra los judíos, contra los paganos y contra los herejes. Otros escritos eran más directamente dogmáticos, y alguno trataba de astronomía y de cronología.

MOLINÉ

Filed under: Diodoro de Tarso

Atenção!

Se você acha que a Filosofia Cristã foi superada; que a Igreja é arcaica e precisa progredir; que o Cristianismo é irracional; que os Cristãos são incapazes de responder a críticas; que a Teologia moderna é superior à antiga, retrógrada; que a Patrística pertence a um contexto histórico incompatível com a modernidade; que a Igreja sempre controlou consciências;... Suma desse site. Vá ler o Código da Vinci, e faça bom proveito.

Categorias

Blogroll- Brasil

Blogroll- Portugal

Blogroll- USA

Hinos

Música Sacra - Natal

Música Sacra - Páscoa

Música Sacra - Quaresma

Música Sacra- Advento

Site Meter

  • Site Meter

Sites

Wordpress